La pandemia generada por el COVID-19 obligó a las diferentes instituciones de salud a adoptar la tecnología, de manera rápida, para poder cambiar el modo de asistencia sanitaria. Los principales diferenciadores que caracterizan el denominado «hospital digital» tienen relación con las video consultas, el monitoreo de pacientes mediante dispositivos inteligentes, la citación en línea, entre otros.
La tecnología y sus innovaciones, como la inteligencia artificial (IA), posibilitan, en el campo de la medicina, el mejoramiento de la medición de datos, contribuyen a la generación de estrategias para el tratamiento personalizado de las distintas enfermedades y la optimización del propio servicio de salud. Esto se logra, inicialmente, a través del análisis de Big Data de grandes cantidades de información generadas por cada paciente.
Podemos ejemplificar que tenemos una cantidad considerable de pacientes que tienen la misma enfermedad y síntomas. De acuerdo a toda esa información de pacientes, Big Data obtiene información valiosa en el transcurso del tratamiento, desde que medicamentos produjeron una mejora al paciente, hasta los medicamentos que causaron mal estar. Toda esta información está relacionada a otros factores como, la edad, tipo de sangre, antecedentes del paciente u otros para que podamos entregar un tratamiento eficiente de acuerdo a los datos específicos del paciente. Esta información inteligente y legible, más la inteligencia artificial ayudan a tomar decisiones de manera rápida, minimizando el porcentaje de error y al mismo tiempo ayuda a que el paciente gane tiempo en su tratamiento.
¿Cómo entra la tecnología en todo este proceso? Inicialmente se tiene la responsabilidad de almacenar toda esta información de manera digital. Para ello, la institución de salud requiere de un equipo de almacenamiento (Storage) de alta gama, ya que un solo paciente puede generar cientos de Tera Bytes (TB) de información. Toda esta información debe estar cuidadosamente guardada y respaldada, para poder entregar un servicio continuo, ya que el servicio de salud nunca para. Aparte del sistema de almacenamiento, se requiere de equipamiento de cómputo de alto performance, para poder tener software de Big Data para el análisis de los datos, como también para tener herramientas de machine learning (ML) e inteligencia artificial (IA). Asimismo, requerimos de equipamientos NAS, que sirve como un almacenamiento de carpeta compartida utilizada para guardar imágenes de distintos estudios. Podemos continuar con otros componentes como las redes de comunicación alámbricas e inalámbricas, como eje principal para interconectividad de equipamiento médico, usuarios, pacientes con los servicios tecnológicos.
Nosotros como proveedores de soluciones informáticas, entregamos soluciones a medida para cada institución de salud. Con la experiencia en el trabajo con varios hospitales y clínicas, más la representación de marcas como HPE, HPE Aruba, Fortinet, podemos integrar los distintos segmentos indicados más el de seguridad informática, sistemas operativos, virtualización, entre otros.